Beny Lorenzo, tiene un local con venta de pollo sobre la décima avenida norte, en donde hoy autoridades realizaron el resguardo de las calles para evitar la instalación de la vendimia ambulante de migrantes de Haití.
Ella, aseguró que al fin podrá recuperar algo de sus ventas, pues sus clientes ya no llegaban a su negocio por la gran cantidad de puestos ambulantes que ocupaban toda la banqueta y tapaban la entrada al establecimiento.
“Si bajaron bastante porque la gente no tenía donde estacionarse, lo que hacían era irse a otras tiendas. Con esta medida esperamos recuperar nuestras ventas y reponer el tiempo perdido, hemos perdido mucho pollo porque mis clientes pasaban de largo”.
Beny Lorenzo / Comerciante del centro de Tapachula.
María Olga, es clienta de Beny, para ella fue sorprendente volver a caminar por la décima norte con tanta tranquilidad, pues prefería ya no ir al centro por tanta vendimia ambulante. Respaldó y calificó de buena la decisión de las autoridades de regresarle este espacio a los tapachultecos.
“Me gusta mucho, está bien bonito…nos gusta mucho que esté limpio, porque ya no nos dejaba pasar toda esa gente, que bueno que lo están haciendo los felicito”.
María Olga / Clienta
Después de mucho tiempo volvieron a verse las fachadas de algunos negocios que desaparecieron entre la gran cantidad de puestos informales establecidos por personas en movilidad. Hoy la gente caminó con mucha tranquilidad y se motivó a realizar sus compras.
Para la representación de la Confederación Patronal de República Mexicana en la Costa de Chiapas, la medida obedece a restablecer el estado de derecho de los tapachultecos y que sin duda afectó por muchos meses a la economía de los comerciantes y empresarios locales.
“Se ha recuperado el estado de derecho y motiva a la gente a venir al centro. No podemos el comercio informal, ni actividades que estén fuera del marco regulatorio, esto era un clamor de mucho tiempo atrás”.
Pascual Necochea Valdez / Presidente COPARMEX Costa de Chiapas.
El líder empresarial, hizo hincapié en mantener este orden en el centro, que las autoridades mantengan esta vigilancia para no permitir que regresen los puestos ambulantes de los extranjeros, pues la cosas se deben hacer siempre respetando las normas municipales.
Por ahora el espacio de al menos 7 calles que sirvió para juegos de apuesta, casas de cambio clandestinas, venta de comida en condiciones insalubres, baños a cielo abierto, peluquerías, sin espacios para el peatón y automovilistas, está libre y se mantiene resguardado por más de 70 elementos de la policía municipal, policía estatal e inspectores de servicios públicos.