A pesar de que se observó una disminución en los casos de viruela del mono en Europa y América, la Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió mantener el nivel de alerta máxima para este padecimiento, indicó el organismo a través de un comunicado.
El Comité de Emergencias expresó que sigue habiendo motivos que causan “inquietud” debido a los nuevos contagios en algunos países como la falta de medios para hacerle frente y la estigmatización de las poblaciones de riesgo, a pesar del avance que se realizó en la lucha contra los brotes de esta enfermedad.
Desde julio fue declarada como una emergencia sanitaria mundial y actualmente se podrían liberar fondos por parte de la denominación Emergencia de Salud Pública de Interés Internacional de la organización, la cual está diseñada para activar una respuesta internacional coordinada para colaborar en el intercambio de vacunas y tratamientos.