Integrantes del Espacio Estatal del Maíz Nativo de Oaxaca, conmemoraron el “Día Estatal en Defensa del Maíz Nativo”, para pedir a la sociedad que se sume a estas acciones, y a las autoridades trabajar para evitar más afectaciones.
Tras llevar a cabo un ritual prehispánico, afirmaron que en últimos tiempos han sido difíciles debido al deterioro de la salud muy ligado a el cambio en los hábitos alimenticios, la destrucción de la naturaleza y la dependencia alimentaria, pero a su vez han brindado momentos de diálogo sobre lo que representa cultivar los propios alimentos para tener salud y decidir qué valores queremos fortalecer para construir colectivamente una buena vida, en la que se protejan de las diversas pandemias.
Demandaron al Estado la prohibición de los agrotóxicos en general y no solo del glifosato, ya que estos venenos han causado muertes en comunidades humanas, animales, vegetales y de hongos en todo el planeta y en particular en comunidades oaxaqueñas que se han ilusionado por la productividad y los resultados rápidos pero peligrosos.
Señalaron que la prohibición de todos los cultivos transgénicos en el país, no solo del maíz, ya que al cultivarlos se deterioran las tierras por el manejo agroindustrial que les dan, al mismo tiempo que las envenenan con glifosato, el herbicida asociado a estos cultivos por la transnacional semillera Monsanto, hoy Bayer.
El apoyo a las iniciativas autónomas de campesinos y organizaciones para hacer producir la tierra como lo enseñaron los ancestros, así como con las innovaciones que se van generando en las propias comunidades por los retos que enfrentan y que no dejan de lado los elementos que constituyen la comunalidad.
Se pronunciaron a favor de la Defensa del Maíz Nativo de Oaxaca, para definir sus propias formas de vincularse con lo que se come, poniendo en el centro de la vida sus saberes comunitarios que de forma ancestral han estado vinculados al territorio y que permiten irse transformando de acuerdo con sus propias maneras y en sus propios tiempos.