Otra colonia más sin agua potable en Tapachula, ahora fueron los habitantes de la colonia Mil Garzas, quienes se manifestaron en las oficinas de COAPATAP, ya que tienen varios días sin que el vital líquido llegue a sus viviendas.
Cansados de promesas incumplidas y ante una situación que califican como insostenible, los vecinos con pancartas y reclamos, denunciaron que el suministro de agua ha sido prácticamente nulo, lo que los ha obligado a recurrir a la compra de pipas, lo que, genera un gasto extra en la economía familiar.
Los colonos explicaron que, en muchos casos, los recibos mensuales superan los 500 pesos, pese a no recibir el servicio. Además, aseguran que lo poco que llega a sus viviendas apenas alcanza para llenar unas pocas cubetas.
“Ya estuvo bueno de tantas trabas de Coapatap. No nos mandan agua y los recibos sí llegan con cobros excesivos. Nos están cobrando por aire”.
Sara Cifuentes Villatoro / Habitante de la Colonia Mil Garzas.
La problemática no se limita a Mil Garzas. Colonias cercanas como Monroy, Coapantes, Francisco Villa y Laureles también enfrentan una situación crítica.
Algunas familias han optado por recolectar agua de lluvia para poder cubrir necesidades básicas como el aseo personal, lo que ha generado preocupación por los riesgos sanitarios.
“Estamos esperando que llueva porque no tenemos dinero suficiente para seguir pagando tantas pipas, porque un rotoplas cuesta 300 pesos. Esta falta de agua potable puede generar enfermedades por falta de higiene”.
Isidro Martínez / Habitante de la Colonia Mil Garzas.
Los habitantes recordaron que hace casi tres meses entregaron un oficio a Coapatap, el cual fue recibido, pero no atendido. En ese documento, solicitaban el envío de una cuadrilla técnica para revisar casa por casa, sin que hasta la fecha se haya cumplido dicha promesa.
Además de las quejas por el desabasto, los vecinos expresaron sospechas sobre un posible desvío del recurso hídrico a otras zonas o incluso su venta irregular.
Señalaron directamente al personal operativo, acusándolos de no abrir las válvulas necesarias para el abastecimiento.
Los vecinos exigen una reunión directa con el nuevo director de Coapatap, ya que no saben ni quien es; asimismo piden una explicación puntual sobre la crisis, y restablecer el servicio a la brevedad.