El pasado 29 de octubre, el fuego le arrebató todo, menos la esperanza, la casa de María Concepción Gutiérrez Méndez, mejor conocida como Conni, fue consumida por las llamas luego de que unos ladrones no solo la despojaran de lo poco que tenía, sino que además incendiaron su vivienda hecha de madera. Desde entonces, Conni vive entre los restos calcinados de lo que alguna vez fue su hogar, acompañada únicamente por sus perros y gatos, sus fieles compañeros de vida.
De acuerdo con su testimonio, el día del incendio no se encontraba en casa, ya que había salido a buscar trabajo. Al regresar, una vecina le informó que su vivienda ardía en llamas. Al llegar, intentó sofocar el fuego con el agua que tenía almacenada, pero las llamas consumieron por completo la estructura y lo que quedaba de sus pertenencias. Conni, de 59 años, viuda y sin familiares en la ciudad, enfrenta sola las consecuencias de este siniestro.
Además de perder sus pertenencias y su hogar, enfrenta graves problemas de salud. Padece diabetes e hipertensión y todos sus medicamentos se destruyeron en el siniestro. Aunque recibió algunas dosis de emergencia, su tratamiento continúa incompleto. A ello se suma su preocupación por alimentar y cuidar a los animales que rescata.
Quienes deseen apoyar a Conni pueden hacerlo con donaciones de ropa, calzado del número 6, cobijas, muebles, materiales de construcción o alimento para sus animales. Los apoyos pueden entregarse directamente en su domicilio, ubicado en Hacienda Las Carmelitas, tenencia de San Nicolás Obispo, en Morelia.
Hoy, Conni necesita de todos. Ya dio el primer paso para reconstruir su vida, pero no puede hacerlo sola. Cada cobija, cada tabla, cada gesto cuenta.
El invierno ya está aquí… y aún hay tiempo de tenderle la mano y ayudar a Conni a volver a tener un hogar.