Un sujeto dedicado a delinquir fue víctima de su propio descuido y terminó golpeado y amarrado por el propietario del vehículo que pretendió robar, ya que al romper uno de los vidrios, el ruido alertó al dueño.
El delincuente, originario de Candelaria, llegó a Escárcega a cometer sus fechorías, sin embargo, en esta ocasión, su error le hizo una mala jugada, ya que al quedarse atrapado, tuvo que romper uno de los vidrios y eso alertó al propietario, quien no tardó en salir de su hogar, para ir a enfrentar al malandro.
La combi se encontraba estacionada en la calle 31-B, de Escárcega, pero por descuido activó el seguro y solo se encerró dentro de la unidad, y para sus hombres, el propietario logró escuchar el ruido del vidrio lateral que tuvo que romper para intentar escapar, pero no le dio tiempo, y el dueño le propuso una paliza, lo sometió, amarró y entregó a las autoridades policíacas municipales.
En su lugar, llegaron los elementos policíacos y éstos se encargaron de poner a disposición de la vicefiscalía general de justicia, por el delito de robo, daños en la propiedad y lo que resulta a este amante de lo ajeno.