Las populares galletas en tubo de Marinela, entre ellas Mini Canelitas, Mini Triki Trakes y Mini LORS, han dejado de encontrarse en las tiendas de México debido a una combinación de factores comerciales que afectaron su permanencia en el mercado.
Aunque muchos consumidores recuerdan estas presentaciones con nostalgia, la empresa enfrentó ventas insuficientes para justificar su distribución a nivel nacional. De acuerdo con información del sector, las versiones en tubo tenían un costo más elevado y, además, ocupaban más espacio en los anaqueles, lo que complicaba su rotación frente a otros productos de mayor demanda.
Otro punto determinante fue su envase tipo tubo, un formato atractivo pero más costoso de producir que las bolsas convencionales. Los materiales, la impresión y el proceso de empaque incrementaban el precio final, haciéndolo menos competitivo frente a otras presentaciones de galletas.
Aunque algunos consumidores aún preguntan por estas versiones, actualmente no forman parte del portafolio disponible en la mayoría de tiendas, y no se han anunciado planes oficiales para su regreso.