El cabello puede debilitarse por diferentes razones: exceso de calor, tintes, estrés o mala alimentación. Sin embargo, recuperarlo es posible con constancia y productos adecuados.
Qué puedes hacer:
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Usa tratamientos con proteínas o keratina para reconstruir la fibra capilar.
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Aplica aceites nutritivos, como el de coco o ricino, una vez por semana.
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Reduce herramientas de calor como planchas o secadores.
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Incluye omega-3 en tu dieta para mejorar la salud capilar desde dentro.
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Evita peinados muy apretados que generen tensión y debilitamiento.
Resultado esperado:
En aproximadamente 4 a 6 semanas, el cabello comienza a verse más fuerte, brillante y resistente.