Meryl Streep es sinónimo de excelencia en actuación. Con 21 nominaciones al Oscar, más que cualquier otra actriz en la historia, ha dejado una marca indeleble en el cine. De estas nominaciones, ha ganado tres estatuillas por sus papeles en Kramer vs. Kramer (1979), Sophie’s Choice (1982) y The Iron Lady (2011).
Lo que diferencia a Streep es su habilidad para transformarse completamente en cada personaje, desde una madre divorciada hasta la poderosa Margaret Thatcher. Durante la filmación de The Devil Wears Prada, Streep mantuvo una actitud distante en el set para reflejar mejor la intimidante personalidad de Miranda Priestly.
Además, es conocida por su ética de trabajo. Para su papel en The Iron Lady, pasó meses estudiando los discursos de Margaret Thatcher y adaptando su tono de voz, un esfuerzo que le valió la aclamación de la crítica.
Nos vemos en Giros Puebla todos los días de 11 a 1 pm para compartir las historias de las estrellas que nos inspiran.
– Paco Corral