Por lo general un menú navideño se compone de aperitivo, entrante, plato principal y postre. Ya que todos estos platos se sirven en diferentes cantidades, deberás tener en cuenta cuántos ofrecerás para no romper la armonía de los platos.
Lejos de necesitar una gran experiencia en la cocina, lo que debes tener en cuenta a la hora de elaborar tu menú navideño son nociones básicas para mantener el equilibrio entre las comidas. Para esto, lo primero que deberás establecer será el número de platos que servirás.
Los postres suelen tener muchas grasas e hidratos, por lo que es recomendable reducir estos nutrientes en el aperitivo, el entrante y/o el plato principal.
Aquí algunas opciones que te podrían ser de gran utilidad:
- Aperitivo: boquerones en vinagre
- Entrante: crema de langostinos
- Plato principal: rape en salsa verde con almejas
- Postre: pavlova de frutos rojos
- Aperitivo: hummus de lentejas y tostadas
- Entrante: crema de verduras
- Plato principal: lasaña vegetariana
- Postre: polvorones de aceite