Ante el incremento del nivel del agua en el Río Bravo, la Dirección de Protección Civil y Bomberos en Nuevo Laredo, Tamaulipas, llamó a la población a no introducirse por el peligro que representa.
Humberto Fernández Diez de Pinos, Director de PCyB, expuso, que la creciente en el río es de 1.90 metros, y aunque actualmente se encuentra en etapa de decremento, el riesgo sigue latente.
El funcionario advirtió, categóricamente, “que si alguien entra al río, podría perder la vida ya que la corriente está muy fuerte y no habría escapatoria de ella”.
Por otra parte, en Ciudad Victoria la Secretaría de la Defensa Nacional activó el Plan DN-III tras las fuertes lluvias que azotaron el estado de Tamaulipas.