El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), advirtió que el uso de vapeadores en pacientes con predisposición genética a la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), es un factor que definitivamente podría influir en el desarrollo de esta patología en un periodo de tres a cinco años comparado con los 15 a 20 que tarda en gestarse en un paciente fumador.
La neumóloga del Hospital Regional “1° de Octubre” del ISSSTE, Guadalupe Espitia Hernández, explicó que esta enfermedad destruye el tejido pulmonar, se caracteriza por causar atrapamiento de aire en los pulmones, debido a que pierden su capacidad elástica, van creciendo y reteniendo el aire que se aspira, con lo cual se dificulta el intercambio gaseoso. Incluso recalcó que “la EPOC sigue siendo una alerta internacional, debido a que de las enfermedades crónico-degenerativas pulmonares no infectocontagiosas es número uno en el mundo, con prevalencia de 10.3 por ciento en la población global”.
Específicamente del caso de México, informó que en pacientes que tienen más de 60 años, esta patología tiene una prevalencia de 11.3 por ciento. En el Issste es la primera causa de atención y discapacidad por enfermedad respiratoria crónica, es decir, cinco de cada 10 pacientes que requieren oxígeno para vivir son por EPOC en etapas terminales. Con el objetivo de reducir su impacto en deterioro de la calidad de vida, discapacidad, riesgo de muerte y alto gasto financiero en salud, recomendó sensibilizar a la población en acciones preventivas, como no usar vapeadores, no fumar, ni exponerse a humo de tabaco o inhalación de biomasa (humo de leña) y fomentar el uso de mascarillas de protección industrial en trabajadores de la minería, lo que ha demostrado que abate el riesgo de EPOC.
Espitia Hernández, señaló que “las sustancias que se le adhieren a derivados de la nicotina usados en vapeadores suelen estar adulteradas, son a base de sustancias oleosas y, al ser inhaladas mediante calor, tienen mayor efecto destructivo dentro del pulmón, esto hace que la enfermedad curse de manera más rápida que en un paciente que consume tabaco”.
Sin embargo, la especialista aclaró que ambas formas de EPOC son potencialmente letales, la relacionada al tabaco tiene mayor predisposición a desarrollar complicaciones asociadas a cáncer; en el caso del vapeo tiene mayor propensión a generar rápidamente fibrosis pulmonar, lo cual empieza a presentar síndromes combinados y los pacientes demandan mayor atención sanitaria.
La recomendación para pacientes que por años se han expuesto a humo de cigarro por ser fumadores activos o pasivos, a biomasa, o que tienen exposición laboral relacionada con este tipo de contaminantes, es que acudan a chequeos anuales mediante espirometría y determinar el momento en que se confirme el diagnóstico de la enfermedad, que es cuando se requiere intervención farmacológica, concluyó la neumóloga.