La ONU Mujeres informó que a nivel mundial se estima que la brecha salarial de género es del 20%. Lo anterior significa que las mujeres en la vida laboral ganan apenas un 80% de lo que ganaría un hombre.
El organismo explicó que “el efecto acumulativo de las disparidades salariales tiene consecuencias negativas reales y cotidianas para las mujeres, sus familias y la sociedad, especialmente durante las crisis”.
La pandemia hizo aún más evidente la actual problemática, y es que la crisis sanitaria por Covid-19 dejó a 95 millones de personas en la pobreza extrema y una de cada diez mujeres del mundo se encuentran enfrentando un escenario de este tipo.
La ONU Mujeres recalcó que “la equidad de remuneración es importante porque la brecha salarial de género es una injusticia flagrante que somete a millones de mujeres y familias a una vida de pobreza fuertemente arraigada y desigualdad de oportunidades”.
En caso de que se siga presentando la misma tendencia, se advierte que para el 2030 podrían existir más de 340 millones de mujeres y niñas en la miseria, aunado a que al menos un 4% podría estar en riesgo de sufrir inseguridad alimentaria extrema .