Con el objetivo de fomentar en la población penitenciaria una cultura de participación laboral activa, el Centro Federal de Readaptación Social número 15 de Villacomaltitlan, ofrece a la iniciativa privada de la región, naves industriales para la producción de productos chiapanecos.
Araceli Valencia Martínez, Directora General del CEFERESO 15, ante representantes de empresas, dijo, dentro del complejo penitenciario hay seis naves industriales disponibles para la elaboración, manufactura y producción de productos.
“Las naves industriales en dimensiones van desde los 1,214 m2 hasta los 1,500 m2. Cuentan con oficinas administrativas, cada una de estas naves industriales están listas para adaptarse ante cualquier proyecto; esto nace como un derecho que la constitución y la ley nacional de ejecución penal lo consideran como obligatorio para la reinserción de las personas privadas de la libertad a la sociedad.
Araceli Valencia Martínez / Directora General del CEFERESO 15.
Las naves industriales están a disposición de los empresarios interesados en echar a andar un proyecto, bajo todo el aparato de seguridad que guarda el centro penitenciario, en las cuales trabajaran las personas privadas de la libertad como un aporte a la sociedad.
Cada una de las naves al interior del centro opera o se mueve de manera programada.
Aclaró que, no se hace ningún pago por arrendamiento y los servicios de luz y agua son absorbidos por el mismo CEFERESO, salvo algunas situaciones que se tenga que cubrir previo acuerdo.
También, las empresas pueden ingresar maquinaria sin ningún inconveniente, sólo, mediante oficio de acuerdo y con previo aviso.
Además, cuenta con modulos equipados con maquinaria industrial que puede apoyar a los proyectos que se consoliden
“Desde que entró en operación el centro federal, lamentablemente estas naves industriales no se han podido utilizar. Ojalá que alguien interesado en esto, podamos coadyuvar con ustedes para ofertar trabajo a las personas privadas de la libertad”.
Actualmente, el centro penitenciario cuenta con 2,520 personas privadas de la libertad, mismas que constantemente son capacitados en diversos talleres como carpintería, mecánica, sastrería y elaboración de conservar y deshidratación de frutas.
En baja California y Sonora empresas nacionales aprovechan estas naves industriales al interior de los CEFERESO con mano de obra penitenciaria.