En las últimas semanas, las noticias sobre la reestructuración de Warner Bros. Discovery no han parado y siguen sumando. Lo que empezó con la cancelación de Batgirl en su etapa de post-producción, continuó con la desaparición de cientos de horas de shows en HBO Max y el despido de 70 personas de HBO, que representaba el 14% de todo su equipo.
Además, se acaba de confirmar que las razones detrás de los nuevos retrasos de Aquaman y Shazam es porque el nuevo CEO de la compañía, David Zaslav, acaba de anunciar que en sus esfuerzos por ahorrar dinero operativo ya sólo tienen presupuesto para estrenar dos películas en 2022: Black Adam y Don’t Worry Darling.
Cuando se consolidó la compra de Warner Bros por parte de Discovery, se anunció que la compañía tenía 55 mil millones de dólares en deuda. Esto derivado de los esfuerzos de AT&T para convertirla en un conglomerado mediático, lo que provocó que el estudio perdiera 75% de su valor de mercado, por lo que tuvieron que vender la compañía por 43mil millones de dólares, cuando en 2016 la empresa de telecomunicaciones gastó 85mil millones para adquirir el grupo de Warner.
Por eso, cuando Discovery se fusionó con Warner, David Zaslav tenía que pagar todas esas deudas y seguir compitiendo con gigantes como Netflix y Disney, por lo que desde el principio se comprometió a ahorrar más de 3 mil millones de dólares. En un principio, analistas aseguraron que Zaslav tenía una mente más enfocada en la producción cinematográfica tradicional y sabía negociar con grandes talentos, por lo que esperaban que pudiera aminorar las controversias y tensiones que crearon los ejecutivos Jason Killar y Ann Sarnoff, quienes estuvieron a la cabeza de WarnerMedia y que decidieron priorizar el contenido de streaming por sobre los estrenos de cine, cosa que hizo que Christopher Nolan le diera la espalda al estudio.
La transición antes de completarse la fusión parecía que iba por fin a estabilizar las producciones de Warner Bros. Éxitos como el de Peacemaker y The Batman auguraban que las propiedades de DC Cómics comenzaban a ir por buen camino. Y decisiones como vender el canal de The CW y cancelar series como Batwoman, la serie de los Gemelos Fantásticos y Naomi, aunque dolorosas para muchos/as fans, eran entendibles desde un punto de vista financiero.