Con vehículos blindados, jeeps, drones, aeronaves y un despliegue por mar, tierra y montaña, el Ejército de Guatemala reforzó ayer su frontera con México para evitar el paso del crimen organizado.
Las fuerzas armadas de Guatemala mantienen una fuerte presencia en la frontera con México mediante la Operación Cinturón de Fuego, un despliegue militar que busca resguardar la soberanía y prevenir amenazas transnacionales.
Militares guatemaltecos realizan patrullajes terrestres y fluviales a lo largo del río Suchiate, en Ocós, San Marcos, una de las principales zonas limítrofes con México.
Este operativo, que se lleva a cabo de manera indefinida y las 24 horas del día, forma parte de una estrategia de seguridad reforzada en la región.
En este esfuerzo, las Fuerzas Armadas mexicanas también colaboran del lado de su territorio, extendiendo la vigilancia a las regiones de Petén, Huehuetenango y San Marcos.
El Coronel Juan Ernesto Celis menciono a medios nacionales e internacionales que : “Estamos listos para defender nuestra frontera, esté es un punto histórico, la barra del Suchiate (del lado Mexicano), donde desarrollamos patrullaje terrestre y aviones militares”, que forma parte de la “Brigada de Operaciones para Montaña”, mientras militares y kaibiles se despliegan frente al Océano Pacífico.
Con el apoyo de vehículos blindados, soldados de ambos países recorren los puntos estratégicos para garantizar el control fronterizo y la seguridad en la zona.