El minimalismo ha dejado de ser solo un estilo de decoración para convertirse en una filosofía de vida. Inspirado en la idea de “menos es más”, este movimiento busca eliminar lo superfluo y priorizar lo esencial, tanto en espacios como en la forma de vivir.
En decoración, el minimalismo utiliza colores neutros, líneas limpias y un mobiliario funcional. Más allá de lo estético, tiene beneficios tangibles: estudios demuestran que los entornos despejados reducen el estrés y aumentan la productividad. En Japón, esta tendencia se relaciona con el concepto de “ma”, que valora los espacios vacíos como parte fundamental de la armonía.
A nivel personal, esta filosofía invita a reflexionar sobre nuestras posesiones y a evaluar cuánto realmente necesitamos para ser felices. Autores como Marie Kondo, con su método KonMari, han popularizado esta idea, promoviendo el desapego de objetos que no “despiertan alegría”.
Por otro lado, el minimalismo financiero ha ganado tracción en el ámbito del estilo de vida. Se trata de reducir gastos innecesarios para centrarse en lo que verdaderamente importa, como experiencias y bienestar emocional.
Adoptar el minimalismo no significa despojarse de todo, sino vivir con intención. Es una invitación a crear un entorno que refleje nuestros valores y a priorizar la calidad sobre la cantidad.
Nos vemos en Giros Puebla todos los días de 11 a 1 pm para seguir explorando cómo pequeños cambios pueden generar grandes impactos en tu vida.
– Paco Corral